El proceso del Monitoreo Global del SIDA ha establecido poner mayor énfasis con relación a la igualdad de género, la realización de los derechos humanos y la eliminación del estigma y la discriminación. Esto se debe a que muchas personas viviendo con VIH manifiestan una constante violación a sus derechos pese a las leyes que existen en los distintos países.

Paraguay cuenta con la ley 3940/09 donde tiene sus especificaciones con respecto a las condiciones y derechos laborales en el Artículo 20 y 21, además de dos reglamentos específicos referidos al VIH y sida. El primero es la resolución 730/09 que exime la obligación de la prueba de VIH para el acceso a un empleo y el segundo es una norma específica para trabajadores de transporte “por el cual se establece las directrices para fomentar acciones sobre el VIH y el sida al nivel de las empresas del sector transporte terrestre en el Paraguay” que podría ser base para la generalidad de empleos.

La falta de información y de abordaje sobre el VIH reproducen el estigma y la discriminación y pese a las leyes que existen las personas seropositivas están expuestas constantemente a violaciones de sus derechos. En el año 2021 se registraron 184 denuncias en el Centro de Consejería y Denuncia, de los cuales 52 fueron por discriminación del estado serológico, 13 por violación del derecho a la voluntariedad de la prueba, 43 por violación del derecho a la confidencialidad del estado serológico y 76 por otras causas. De estos casos, 17 se dieron en el ámbito laboral.

A nivel internacional igualmente persisten recomendaciones al país para erradicar toda política discriminativa para la respuesta al VIH. El estigma y los prejuicios dificulta el acceso a los servicios por el enfoque coercitivos y punitivos que prevalecen.

Es importante resaltar que la población más vulnerable es la trabajadora y en particular recordar a las trabajadoras sexuales y otras actividades de servicio que están sin reconocimiento, seguridad y protección social.

Las mujeres transgénero, a menudo y desde una edad temprana, sufren el estigma, la discriminación y el rechazo social, algunas veces en sus propios hogares y comunidades por su expresión de identidad de género limitando su derecho al trabajo digno e igualmente que en el caso de las personas transgénero que realizan trabajos sexuales no reciban información adecuada o atención y seguridad social, muchas veces de prevención y acceso a tratamientos para preservar su salud.

Señala la OIT: “El mundo del trabajo tiene un papel clave que desempeñar. El estigma y la discriminación en el lugar de trabajo marginan a las personas, empujan a las personas que viven con el VIH a la pobreza y socavan el objetivo del trabajo decente." (Chidi King, Jefe del Servicio de Género, Igualdad, Diversidad e Inclusión de la OIT) y en tal sentido, para hacer frente a esta realidad que socava los derechos, es importante generar un cambio estructural no solo en las leyes sino también en la educación, donde el Estado y también los empleadores desde el sector privado, entiendan que ninguna condición, ni la discapacidad o el ser seropositivo, es un impedimento para el trabajo digno.

Boletín número 15 del Observatorio de VIH

Bibliografía

Ley 3940/09

Red de ONG’s que trabajan con VIH. Informe del Centro de Consejería y Denuncia 2021.

Vázquez, Andrés y Gamarra, Fabián. Red de ONG’s que trabajan con VIH. Consultas sobre Políticas Públicas en VIH y Sida. 2014.

ONUSIDA. Trabajo Sexual y VIH/Sida. Actualización Técnica. Marzo, 2003.

Informe de Monitoreo Global del SIDA (GAM), 2021.

OIT. El estigma y la discriminación siguen siendo problemas importantes para los trabajadores con VIH/SIDA. Noviembre, 2021. https://www.ilo.org/global/about-the-ilo/newsroom/news/WCMS_830317/lang--es/index.htm